Dia 16. Restaurante Aqua. Japoñol 3.0

Hola chicos, que tal? Como todos los lunes entrada nueva.

Como muchos ya sabéis, el Restaurante Aqua es mi segunda casa en Castellón, tanto por su tipo de cocina, por el trato que siempre nos brindan y sobre todo por tantos momentos especiales que hemos vivido allí.

 

Desde hace tres años, Pedro Salas, por estas fechas, nos deleita con un menú de fusión pura y dura de cocina Mediterránea y japonesa.

Vamos a repasar brevemente, todo lo que nos ha ofrecido durante estos tres años este crack de la cocina.

Allá por el 2014 llegó el primer Japoñol, denominado Gastrotapas Japòñol, fue todo un descubrimiento para muchos aficionados a la buena mesa de toda la provincia.

Dhasi frío de tomates de colgar asados, gamba roja y hierbabuena.
Shashimi de Jurel con olivas partidas, chips de alcachofa aceite de anchoas, ponzu de vino amartillado.
Témpura de berenjenas y lleteroles, mojo picón.
Tataki de pez mantequilla en adobo con tomate seco, siitake y queso manchego.
Micro-tsunami mediterráneo.
Uramaki de Vieiras, Boniato, cacahuete y alegrías riojanas.
Futomaki de “calamarcels en cubeta”.
Gunkan de tartar de dorada con pipiaran.
Temaki de Sardina y Albahaca.
Oshi de foie gras y Anguila del Delta.
Niguri de “cansalà” con jugo de escalibada.
Bacalao a la brasa, miso y “calçots”.

 Fresón, fresas, sake y yogourt.
 Chocolate Sichimi Tougarasi.


En 2015 el Japoñol 2.0 ya tenia una larga lista de espera, de hecho tuvieron que alargarlo una semana mas, ante la gran demanda que tuvo esta edición.

Ensalada de Sepia, judías verdes, sésamo y wakame.
Ramen en caldo de puchero.
Vieiras asadas y marinadas en miso y jerez, guiso de calamares, huevo frito y pando crujiente.
Las Japobravas.
Yakitori Buta Unagi Kabayaki.
Sashimi atún rojo del mediterráneo, cebollas tiernas en soja, emulsión de guisantes.

Sushi
Manzana verde, albahaca, sardina y caviar de wasabi.
Salmón al vermú.
Langostinos y fresa, salsa de miso y yuzu.
Queso de Almedíjar con torreznos, aguacate y tomates asados.
Foie gras, espárragos, remolacha, nueces y mayonesa de trufa.
Txangurro y alcachofas.
Dorada, con limón y aceite de oliva, ajo tierno asado y hierbabuena frita.
Salmonete a la llama, polvo de jamón.

Melón con menta, té matcha, y limones a la sal.
Trufas de chocolate y sésamo.

Y esta fue la edición de 2016, el Japoñol 3.0

Pasamos al menu, con las expectativas por los cielos, y esperando sorpresa tras sorpresa, como en anteriores ediciones, acabamos el menú con cara de niños en día de reyes.

El menú empieza con este pintxo de tártaro de lubina y edamame a las donostiarra.

Tortillitas de camarón y hoja de shiso y la croqueta umami (siitake y kombu), esto mejora, la croqueta estaba brutal, excelsa, sublime, nos pareció  simplemente maravillosa.

Ostra valenciana, con ponzu de nuestros cítricos, en mi vida había visto nada igual, calibre XXL. Usando mi mano como medida os podes hacer una idea. Tenia una textura diferente a todas las ostras que habíamos probado, un poco mas suave en boca, no tan gelatinosa y con un punto de sabor a mar mas bajo.

Shabu-shabu de presa ibérica y cigala. Como era nuestra primera vez, nos contaron que teníamos que cocinar tanto la cigala como la presa sumergiéndolos en el shabu-shabu.

 Con el propio shabu-shabu del plato anterior se acaba de preparar este plato de Yaki Udon.

Yakiniki de longaniza de el Tormo, pan con tomate y all i oli de ajo negro

Gyozas de cap i pota, estas "empanadillas" de morro y pata eran gelatina pura, melosidad elevada al máximo nivel.

Salmón, pimienta y piel de limón, su caviar y ultramarinos: plancton, calamar, pepino y wakame, este ultimo nos gusto especialmente, el calamar, yo diría que crudo, estaba exquisito.

Buey de mar, rico rico, ya llegamos a un punto que no sabíamos cuales nos gustaban mas, todos distintos y cada cual mas sabroso.

Anguila, manzana y calçots, los calçots yo no los noté mucho, pero si el sabor profundo de la anguila en contraste con la suave acidez de la crema de manzana.

Congrio con mostaza de estragón y atún rojo con jugo de pimiento a la brasa.

Trufa y tetilla, sorprendente este guiño tanto a Galicia como a toda la zona trufera del interior de Castellon y Teruel, el queso levemente tostado con el soplete era maravilloso y la trufa, que os voy a contar, estando en plena temporada, una delicia.

Naranjas de nuestro huerto en corte de sashimi con cremaet de ron y especias, el cremaet levemente caramelizado era una golosina, con la naranja fresca una mezcla perfecta.

Bocados dulces del Japón, creo recordar que eran unas trufas con sésamo, helado de chocolate blanco y helado de té marcha.

Resumiendo, gran menú, cada edición se supera, por poco mas de 34€ te pegas un homenaje gastronómico en toda regla, una pena que sólo sea un mes al año, pero bueno, en unos días ya tenemos aquí las fiestas de la Magdalena y Pedro Salas y su equipo nos ofrecerán un nuevo menú festivo y sorprendente como siempre hacen, si venís a Castellon no perdáis la oportunidad de pasaros a disfrutar de su cocina, hasta la semana que viene.